Prólogo de Graciela Lescano: Nuestra Joyería

En el pensamiento colectivo, la joyería se asocia al metal y al adorno del cuerpo.
En América, como cuenta Rex González "el metal expresó fundamentos íntimos del mundo andino; contenía en sí mismo la potencia de las divinidades celestes y los misterios del devenir de la vida sobre la tierra. Los pueblos originarios volcaron en sus trabajos su visión del mundo, su sensibilidad y sus valores". (1)
El adorno del cuerpo parece ser una constante antropológica en todas las culturas históricas y presentes. Su valor y significado varía según épocas y lugares, conservando siempre la presencia de algún contenido simbólico.
La joyería contemporánea, cada vez más presente en el país, se nutre de la cultura en la que está inmersa, usa técnicas tradicionales, rescata técnicas antiguas, incorpora nuevas, nuevos materiales, nuevos caminos, nuevos pensamientos; estimula constantemente la investigación, la experimentación y la creación artística, sin descuidar el oficio, que es fundamental.
A partir de su relación imprescindible con el cuerpo humano e interactuando con él, las joyas contemporáneas expresan sentimientos, comunican ideas, conceptos, sin estar atadas a la moda. Estas joyas están, principalmente, hechas para ser usadas. La joya contemporánea es un objeto, funcional y artístico.
La exposición “Joyas que cuentan” muestra el trabajo de los talleres Fwiya y de Fabiana Gadano, pone en contacto al artista con el público, y a su trabajo con la mirada de visitantes, compradores, galerías, curiosos e interesados, miradas expertas y noveles, en un esfuerzo por comunicarnos a través del arte.
1: L. Rex González, Tesoros Precolombinos del Noroeste Argentino. Museo de Arte Hispanoamericano Isaac Fernández Blanco.



Comentario de Fabiana Gadano sobre "Joyas que cuentan":

Aquel día, una preciosa jovencita se acercó a la maleza y emergió como por arte de magia con una hermosa flor amarilla de largo tallo. Se lo ató alrededor del cuello de tal modo que la flor le colgara sobre el pecho como una joya valiosa.

Yo notaba que resplandecía porque se sentía especialmente guapa (…)

Al final de nuestro día, depositó la flor en el suelo y la devolvió a la madre tierra. Había servido a su propósito (…) Su joya tenía un significado.

Marlo Morgan, Las voces del desierto.

Pienso en la joya como expresión de un sentimiento y en los materiales al servicio de las ideas. Ideas y sentimientos que habitan en todos nosotros. La joya nos da la posibilidad de portar y comunicar ese mensaje que nos identifica.

Mi labor, como guía de este grupo, consiste en potenciar la expresión individual, brindando herramientas de metodología y diseño, presentando técnicas y lenguajes variados, para que cada diseño surja dictado por un pulso interno, único.

A la manera de una traductora que interpreta en las palabras de cada uno sus sueños y ayuda a convertirlos en algo concreto, con el único propósito de que, al final, solo cuente la obra.